El auge de las conocidas como ‘fake news’ siempre alcanzan sus cotas de máxima difusión cuando se acercan las campañas electorales. La razón es simple: este tipo de noticias falsas pretenden generar una desinformación o una información sesgada y capciosa con la apariencia de noticia veraz, por eso es tan difícil diferenciarlas del contenido real periodístico.
El poder de Internet, los smartphones y las redes sociales han revolucionado la manera en la que los propios medios de comunicación transmiten sus informaciones. La rapidez con la que pueden viralizarse y el alcance de estas noticias también hace que estas falsas noticias con apariencia de verdad se propaguen igualmente de manera instantánea y con consecuencias muy negativas.
La liberación de las comunicaciones ha hecho que los antiguos canales de difusión de noticias, los medios de comunicación, que contaban con herramientas y sistemas para verificar la información, se hayan visto desbordados ante la rapidez de las informaciones, lo que en muchos casos provoca que esas noticias no puedan contrastarse.
Esa tendencia al auge de las ‘fake news‘ que parecía afectar solo al ámbito de los medios de comunicación, está empezando a ser utilizada en el ámbito empresarial, provocando graves daños de reputación y pérdidas millonarias en el caso de las grandes empresas.
De hecho, un informe revela que las ‘fake news’ se difunden seis veces más rápido que las veraces a través de las redes sociales. La probabilidad de que se comparta esta información falsa es un 70% mayor que las reales y tienen una audiencia entre diez y cien veces superior a las verdaderas.
¿CÓMO COMBATIR LAS «FAKE NEWS» EN TU EMPRESA?
La única manera de poder combatir las noticias falsas es estar preparado, por lo que te aconsejamos que, entre los escenarios de crisis contemplados, añadas una buena estrategia ante las ‘fake news’.
Así, ante la llegada de una noticia falsa que afecte a la reputación de la empresa es necesario que exista un comité que pueda evaluar la situación y plantee una estrategia. Este órgano podría estar formado por el director, el responsable legal, el director de comunicación y la persona que mejor conozca los hechos sobre el área que se haya visto afectada.
Como en toda crisis interna o externa, este comité se convocará inmediatamente y su misión será evaluar el escenario, trazar la estrategia comunicativa y tomar medidas legales si fuera preciso. El siguiente paso será diagnosticar el alcance y la repercusión tratando de indagar sobre las fuentes, el contenido, dónde ha sido publicado y cuáles son los mensajes que se lanzan. Todo con un único fin: conocer las verdades y mentiras que se dice de la compañía para plantear las acciones pertinentes.
Una vez que la compañía conozca la dimensión de la crisis debe plantear una estrategia para contrarrestar esas ‘fake news’. Si tu empresa ha ido trabajando la reputación y ha conseguido que la credibilidad sea uno de los valores asociados a su firma, será más sencillo desmentir cualquier tipo de información falsa.
Sin embargo, el mejor muro de contención ante estas ‘fakes news’ son los propios empleados, ya que alguien de dentro siempre estará más autorizado de cara a la opinión pública para hablar de esa situación. Si tus trabajadores transmiten mensajes que apoyen la versión de la empresa contarás también con sus canales personales para llegar a un número mayor de personas.
¿Has sido víctima de una ‘fake news’? ¿Conoces algún caso que haya provocado una crisis de reputación grave en una empresa?
