Todos hemos aprovechado la red Wifi que ofrecen espacios públicos, aeropuertos, bares o centros comerciales para evitar consumir datos de nuestra propia tarifa o para mandar algún archivo pesado cuando nos encontramos fuera de casa. Y aunque esas redes suelen ser seguras, esta despreocupación a la hora de utilizarlas puede acarrearnos más de un disgusto: al conectarnos exponemos nuestros datos, nuestra identidad e incluso nuestro tráfico.
Evidentemente, el problema no es conectarse a una red pública, sino el uso que haces de esa red mientras estás conectado, por eso debes evitar usar tu correo electrónico, acceder a tu cuenta bancaria e incluso utilizar tus redes sociales. Te ponemos un ejemplo.
Un hacker que acudiera a una cafetería podría, con un único aparato, crear una Wifi que hiciera pensar a los que están allí que se trata de la red del propio establecimiento. Una vez conectados, el pirata informático tardaría muy poco tiempo en saber dónde y cuándo nos hemos ido de vacaciones.
Este tipo de ciberataque se conoce como ‘man in the middle’: la información que enviamos pasa primero por el dispositivo de un atacante y después se transmite al router para que le dé salida a Internet y el navegante no sospeche. Además, solo viendo las redes WiFi a las que se ha conectado una persona anteriormente se podría saber dónde ha estado, ya que una vez te conectas a esa red falsa, el hacker puede recuperar tus contraseñas, robar tu identidad y saquear tus cuentas bancarias.
Teniendo en cuenta que en España hay 53,4 millones de líneas móviles, que cada vez realizamos más trámites desde nuestro teléfono móvil -el 92,1% de los internautas se conecta a Internet a través del smartphone-, y que todos alguna vez nos hemos conectado a una Wifi pública de un hotel, un bar o un centro comercial, las posibilidades para un hacker son infinitas.
Cómo prevenir esa vulnerabilidad
Tanto si usas más el teléfono móvil o la tablet, nuestro consejo es que tengas activado siempre el cortafuegos, será tu primera medida de protección, porque denegará el permiso a conexiones entrantes sospechosas.
También es importante tener un buen antivirus para prevenir las infecciones y tener siempre actualizado el sistema operativo y las distintas aplicaciones, porque estas actualizaciones, que a veces nos resultan tediosas, sirven para corregir errores y las vulnerabilidades de seguridad.
Por eso, la mejor recomendación que podemos darte es que uses tus datos móviles siempre que puedas para tener una mayor seguridad. Pero si no tienes más remedio que conectarte a una red pública es muy importante que no accedas a tu cuenta bancaria y si ves nombres de redes del tipo ‘Free Wifi’ o ‘Wifi gratis hotel’, no entres y sal corriendo.
